Cuando eres un aficionado muy pasional por tu equipo de fútbol, puedes llegar a quererlo hasta más que a tu familia. De hecho, según un estudio reciente, la sensación que experimenta un fanático de este deporte con su equipo es similar al enamoramiento en lo que a niveles químicos se refiere. La Universidad de Coimbra (Portugal) ha demostrado que ante situaciones de emociones positivas (un gol, una buena jugada o un buen resultado), se activan en el cerebro regiones similares dentro del córtex frontal a las del amor. Como por ejemplo, se activa la liberación de dopamina.
Por eso no es de extrañar que los hinchas a veces hagan locuras por su equipo, como a lo largo de la historia de la humanidad se han hecho por amor. Eso sí, esperamos que en este caso, no se empiecen guerras por el fútbol como sí se empezaron por crímenes pasionales.
¿Qué hacen los aficionados por su equipo?
Se han hecho muchas locuras documentadas, la más habitual tiene que ver con los recorridos que los aficionados tienen que hacerse a veces para ver a su equipo en directo. Con lo fácil que sería buscar en qué bar ponen el partido y quedarse sentado, codo en barra, con una cerveza bien fresquita. y disfrutar del espectáculo, ¿verdad? Sin embargo, muchos fans se ven obligados a viajar durante horas (o incluso días) para llegar al estadio. Por suerte, solo se suele hacer en ocasiones especiales.
El caso más reciente fue la final de la Copa del Rey que disputaron el Alavés y el Barcelona. Varios aficionados alavesistas llegaron a realizar el trayecto Vitoria-Madrid (la final se jugó en el Calderón) en moto e incluso en bicicleta. ¡Qué duros son estos vascos! Lo malo es que por mucha penitencia previa que hicieran, la final se la acabó llevando el FC Barcelona.
También fue bastante costoso en tiempo y esfuerzo el viaje de Alfredo Duro, conocido tertuliano de El Chiringuito de Mega. El forofo del Real Madrid decidió hacer andando el viaje desde Madrid a Cardiff (sede de la final de la pasada Champions). El camino quedó documentado por los cámaras que viajaban con él y fue objeto tanto de admiración como de mofa a través de Twitter durante su viaje.
— MA20 (@FVaIors) May 23, 2017
Nadie dijo que fuese fácil. pic.twitter.com/Qt7c61rXoV
— MA20 (@FVaIors) May 23, 2017
Alfredo Duro nunca tropieza dos veces con la misma piedra. Duro en acción. pic.twitter.com/1lVn79XEYs
— MA20 (@FVaIors) May 27, 2017
El nuevo Colón. pic.twitter.com/CmyDI4p5is
— MA20 (@FVaIors) May 30, 2017
Unos aficionados chilenos, quizá inspirados por Alfredo Duro, se ofrecieron para hacer el camino que separaba Chile de Rusia (sede del Mundial de Fútbol 2018) a pie igualmente. Salvo los tramos en barco, claro. Desafortunadamente tuvieron que cancelar su hazaña cuando iban por Perú al no clasificarse su selección para el Mundial ni tener opciones de hacerlo en la repesca. Menos mal que no les pilló muy lejos la noticia.
Pero no todo va de grandes distancias. También están los que son capaces de pasar noches a la intemperie por comprar una entrada o el caso de estos aficionados del Manchester United que, en un tour por el estadio, se escondieron en los baños y pasaron allí la madrugada con la idea de salir al día siguiente a la hora del partido. Desafortunadamente, la ingeniosa jugarreta no les salió bien y la seguridad del estadio los encontró por la mañana del día de partido en una inspección de seguridad rutinaria. Por lo menos, tuvieron la suerte de que no presentaron cargos de ningún tipo por haberse colado así en el estadio. Ya que dieron por hecho que, al haber pasado el arco de seguridad antes de la visita guiada, era obvio que no representaban ningún peligro para la salud pública.
Las religiones y las creencias también juegan un papel fundamental para la vida de muchos aficionados. A veces, cuando se desea ver al equipo ganar, hay gente que puede recurrir a cualquier tipo de mecanismos. En África y sudamérica, existe un fuerte componente de creencias cuando se trata de una afición a un equipo, en el que Dios podría ser un jugador más en el campo. Por ello, hay gente que reza, enciende velas, crea santuarios o incluso paga para que recen por él o para que sacerdotes intercedan con Dios en pos de la victoria de su equipo o de su país. Eso sí, las inversiones varían dependiendo del país y de los creyentes.
Los cambios de look son una de las locuras más habituales. Muchos hinchas sienten su cuerpo como un lienzo en el que honrar al equipo de su corazón. Con esa premisa existen numerosos tatuajes, cortes de pelo o modificaciones de algún tipo para que su identidad sea más acorde al equipo que aman.
¿Y tú, qué harías por tu equipo? ¿Te atreverías a imitar algunas de estas «hazañas»?